En el 3020, las fiestas patronales que había en los pueblos, en el milenio anterior, se estudian en las escuelas como parte de la Historia. Así tocaba hoy en el aula, visionar todo lo que en el pueblo de Veguellina de Órbigo, acontecía en las Fiestas de la Parroquia de San Juan Evangelista. Por ejemplo el concurso de tortillas, que luego servirán para el deleite de los vecinos, la actuación del grupo de danzas tradicionales “La Barbacana”, el pregón de fiestas que efectuará el pregonero oficial este año, a propuesta de la Junta Vecinal de Veguellina de Órbigo y que es Andrés Martínez Fernández, nacido aquí, donde estudió en las escuelas y en el instituto de la localidad. Actualmente es Vicerrector de Planificación y Estrategia de la Universidad Rey Juan Carlos en Madrid. Entrada la noche, la verbena pondrá el broche de oro al primer día de fiesta, el sábado 25. Luego durante domingo y lunes, las calles y los hogares del pueblo olerán a pólvora, a juegos de antaño, a alegría, a vida.
Aprovechando estos días festivos, nuestro querido Miguel Pérez, conocido por Trébol, abrirá su extraordinaria exposición-museo del mundo del cine para que todo el que quiera, pueda pasar un exquisito rato, observando los proyectores y demás útiles del mundo de la gran pantalla que bajo las expertas y sabias manos de Trébol, lucen brillantes y útiles, después de haber estado muchos de estos aparatos, en el limbo de desvanes, locales cerrados o lugares donde la herrumbre y el polvo del olvido, les estaban convirtiendo en cadáveres del cinema. Pero aquí ya sabemos que donde Trébol pone el ojo y la mano, se hace el milagro de la vida. A lo largo de su vida, Trébol ha dado vida y recompuesto, a cientos de proyectores, de los cuales tiene una gran parte en la sala de exposiciones del ayuntamiento en la calle Pío de Cela de Veguellina de Órbigo, donde muestra y explica con todo lujo de detalles su funcionamiento. Con emoción te cuenta cómo llegó a él tal o cual artefacto que estaba en desuso y muy mal estado, pero que tras la paciencia y el trabajo, ha logrado darle vida. Sin apenas darte cuenta, vas entrando en la vida de cada uno de los proyectores que te va enseñando. Por la exposición del cine, han pasado escolares, profesores, cineastas y un sinfín de personas que han quedado enamoradas de lo que ha conseguido Trébol. También ha movido su exposición y la ha llevado a la universidad en Madrid, y a otras salas fuera de Veguellina de Órbigo, donde han querido contar con esta joya del cine.
Neuronada: Lo malo de todo esto es que la sala donde expone Trébol, no es permanente ni para siempre. Es una pena que la colección, me atrevería a decir, más grande, mejor conservada y más mimada del mundo del cine en España, no tenga ya un museo permanente único en el que quedarse y poder vivir todos los sueños que en ella habitan aquí en su pueblo. Como siempre, cuando alguien de fuera venga y se la lleve, lo lamentaremos. Pero mientras la tengamos aquí y tengamos al gran Trébol para que nos deleite con su sabiduría y buen hacer, disfrutemos de ella. Treboleandemos por entre los sueños de este artista. ¡Felices fiestas!
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.
