Sobre el dintel de la puerta de entrada a la iglesia del Monasterio Premostratense de Villoria de Órbigo, Maria Reina, la virgen que corona el dintel de dicha puerta, observó con alegría y contento cómo La Semana Santa comenzaba en Villoria de Órbigo por todo lo alto. El viernes 22 de marzo, en el Monasterio Premostratense, se elevaron para todos los asistentes los hermosos sonidos de las voces gregorianas del grupo de la “Escuela Gregoriana de Astorga”. Este concierto sacro estaba incluido en la quinta edición del ciclo de conciertos Passionato que tanto éxito está dando a los participantes y tanto aprendizaje nos está proporcionando a los que gozamos escuchando la buena música. Fueron las trabajadas gargantas de Jesús Sorribas del Barrio, Jesús Sorribas Pérez, Manuel Rodríguez Beltrán, Manuel Rodríguez y Jesús García Mielgo, as que nos deleitaron con su repertorio y sus explicaciones, además de invitarnos a entonar algún estribillo con ellos. Un éxito.

El sábado en la iglesia parroquial de San Miguel, de Villoria de Órbigo, en una conjunción exquisita de tres astros terrenales, a saber: banda municipal de música del Ayto de Villarejo de Órbigo “Sones del Órbigo”, Coral Excelsior de Astorga y coral del Milenario de La Bañeza, escuchamos, con una iglesia en la que no cabía un alfiler, un concierto memorable. En la primera parte del concierto, nos relamimos el corazón con la banda “Sones del Órbigo” que siempre se supera, estuvieron magníficos y nos emocionaron con su repertorio y su manera de interpretar.  En la segunda parte, se unieron a la banda las dos corales participantes, que interpretaron la misa brevis de Jacob de Haan de una manera sublime por parte de todos. Algunos componentes de las corales que vinieron de fuera, me chivaron que Luís Martínez García de Longoria, director de la banda “Sones del Órbigo”, era un director magnífico y que estaban encantados de que les hubiera dirigido. Como no podía ser de otro modo, una mención a otros dos grandes directores; Milagros Alonso Cepedano que cumple esta misión en la coral Excelsior de Astorga y Jairo del Río García, con la misma función en la coral del Milenario de La Bañeza, a los que el director de la banda “Sones del Órbigo”, citó para que salieran a recibir un caluroso aplauso por parte del público asistente. El concierto fue conmovedor, y se notó la entrega que cada miembro de las formaciones presentes, dedica a su preparación. Seguramente al papa actual, le hubiese encantado asistir a este concierto lleno de fuerza calmada, de entrega y de un verbo que hace mucha falta, compartir, porque eso es el milagro de cada formación compartir cada uno con el otro y con los demás el amor por lo bien hecho, para disfrutar en común de las buenas vibraciones que la música encierra. Compartir también con cada persona que conforma el público, su brebaje benigno de emoción.

Lamiguería: Hoy en la miguería, quiero exponer una triste realidad promovida por el párroco de Veguellina de Órbigo que se negó a que el concierto de Semana Santa se llevara a cabo en la iglesia del Carmen de Veguellina de Órbigo. En detrimento de Veguellina, para Villoria de Órbigo fue una enorme alegría. El padre Rodrigo, el padre Juan y el padre Patricio, que son los encargados de los oficios eclesiásticos en Villoria de Órbigo y aledaños, lejos de oponerse, facilitaron con gusto y entrega que se pudiera efectuar allí el extraordinario concierto de Semana Santa que pudimos disfrutar en el precioso escenario de la iglesia parroquial de San Miguel. Qué tristeza que un gran alimento para el alma, como lo fue el conciertazo que tanto nos emocionó, no se pudiera llevar a cabo en Veguellina. Una gran oportunidad, a la vez que una gran pérdida para acercar la iglesia al pueblo, o viceversa.

Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo