El rápido envejecimiento de la población y el constante aumento de la longevidad humana en todo el mundo representan una de las mayores transformaciones sociales, económicas y políticas de nuestra época. Estos cambios demográficos afectarán a todas las comunidades, familias y personas, y nos exigen que volvamos a pensar en cómo las personas viven, trabajan, planean su futuro y aprenden a lo largo de sus vidas y reinventemos el modo en que las sociedades se gestionan a sí mismas.[1]
Ban Ki-moon
Ex Secretario General de Naciones Unidas
2016

 

Este 1 de octubre se celebra un Día Internacional de las Personas Mayores marcado a fuego para ellas por los todavía efectos de la Covid-19 en su salud física y mental.

“La Unión Europea reconoce y respeta el derecho de las personas mayores a llevar una vida digna e independiente y a participar en la vida social y cultural”. Así se lee en el artículo 25 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, que este año cumple 22 años.

Por su parte la Constitución Española, en el artículo 50 asegura que las instituciones “promoverán su bienestar mediante un sistema de servicios sociales que atenderán sus problemas específicos de salud, vivienda, cultura y ocio”.

 

Se trata de palabras mayores, de derechos irrenunciables que en ningún caso quedan han dejarse en el olvido. 

Por ello desde ACTIVOS Y FELICES suscribimos el manifiesto de la Mesa Estatal por los derechos de las Personas Mayores que reclama, entre otras cosas, la aprobación de una Ley integral de los derechos de las personas mayores, la puesta en marcha de políticas públicas dirigidas a evitar la discriminación de los mayores por razones de edad y a hacer efectivos sus derechos y el acceso a ellos.

También reclamamos una nueva forma de ver la vejez, el derecho a mantenerse el mayor tiempo posible en su casa, el derecho a la libertad de aprender o no aprender. Nos referimos a la entrada de forma casi violenta de las nuevas tecnologías en su vida. Hay mayores que se han adaptado, hay otros que no saben, no pueden o simplemente no quieren.

Son las entidades financieras, las administraciones… todos en su conjunto son los que han de facilitar el acceso de los mayores a los servicios bancarios o una reserva de cita médica o la realización de algún tramite administrativos, por ello proponemos la creación de la figura del Gestor de apoyo al mayor en todos los espacios donde sea necesario el uso de la tecnología.

ECONOMIA DE CANAS, UN MOVIMIENTO A TENER EN CUENTA

La longevidad es un logro, así debemos percibirla, como un aspecto positivo. La madurez es la plenitud de la vida. Tener un envejecimiento digno es un derecho y, a la vez, una oportunidad para la sociedad.

 

La economía de las canas es parte de una economía global y también un movimiento social atento a las necesidades de la población mayor de 65 años. Desde la economía de las canas se analizan patrones de consumo de este segmento de la sociedad, creando nichos de mercado específicos.

 

La revalorización de las personas mayores como protagonistas que agregan valor social, económico y político, abre también la posibilidad de generar nuevos bienes, servicios y, por ende, puestos de trabajo. y político, abre también la posibilidad de generar nuevos bienes, servicios y, por ende, puestos de trabajo.

De una visión apocalíptica de la longevidad pasamos al optimismo demográfico: vivir más y mejor es una oportunidad, ya que alienta la creación de nuevos bienes y servicios en múltiples rubros, desde la salud hasta el ocio, la moda, el transporte e incluso el campo de la formación continua.

En el Dia Mundial de la Persona Mayor desde Activos y Felices decimos alto y claro que “Ser Mayor y Feliz es posible”, para ello necesitamos la colaboración de toda la sociedad  y pensar que …”pronto seremos mayores todos”.