En la ULE se mantienen en León las del pasado año, con la incorporación en Ponferrada de los Institutos ‘Gil y Carrasco’ y ‘Virgen de la Encina’.

La Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León hizo pública ayer una nota en la que informó del acuerdo alcanzado con las universidades públicas de la comunidad para ampliar a 53 las sedes en las que se realizarán las pruebas de acceso de la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) de 2020.

En total en toda la comunidad son ocho más que las del pasado año, medida que se ha adoptado para aumentar el espacio entre alumnos y garantizar la seguridad sanitaria por el COVID-19 de los cerca de 9.000 jóvenes que se presentarán en Castilla y León a los exámenes que se llevarán a cabo los días 1,2 y 3 de julio.

En el caso de la Universidad de León (ULE) se incorporarán dos nuevas sedes, ambas en Ponferrada. Se trata de los Institutos de Enseñanza Secundaria ‘Gil y Carrasco’ y ‘Virgen de la Encina’, que se unirán al edificio central del Campus de Ponferrada, lugar donde tradicionalmente se han venido celebrando los exámenes los años anteriores.

En León no habrá cambios y serán los siguientes lugares: Facultad de Derecho, Aulario, Facultad de Veterinaria, Escuela de Ingeniería Industrial e Informática, Escuela Superior y Técnica de Ingenieros de Minas, Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, Facultad de Ciencias Biológicas y Ambientales, Facultad de Educación, y Escuela de Ingeniería Agraria y Forestal.

MEDIDAS PARA EVITAR EL CONTAGIO

Los exámenes se realizarán cumpliendo el protocolo con medidas para evitar el contagio y propagación del coronavirus, que fue aprobado por la Comisión Organizadora el pasado viernes 29 de mayo. Así, sólo los estudiantes y los trabajadores podrán acceder a las instalaciones, y lo tendrán que hacer, obligatoriamente, con mascarilla.

La Consejería de Educación ha recomendado que cada persona acceda al recinto con su propia mascarilla, para hacer más fluido el proceso de entrada al edificio, aunque se facilitará este material de protección a quien no lo tenga.

Dentro ya de las instalaciones, sólo podrán utilizar los ascensores quienes tengan problemas de movilidad. Además, las aulas y los espacios comunes estarán debidamente señalizados y los estudiantes contarán de antemano con información sobre la situación de las aulas en las que realizarán las pruebas.