La formación naranja plantea ayudas para la compra de medidas de protección o la habilitación del espacio público sin coste, entre otras

El Grupo Municipal de San Andrés del Rabanedo ha registrado una moción con cinco medidas para apoyar la hostelería local y reducir el impacto económico de la crisis sanitaria de la covid-19 en este sector.

La formación naranja propone, en primer lugar, aumentar el espacio destinado a la colocación de mesas y sillas sin coste para los solicitantes, bajo la premisa de que se mantengan tanto las medidas sanitarias y el distanciamiento social como la seguridad de los usuarios de la vía pública.

Asimismo, el partido liberal plantea permitir la instalación de una minibarra o mostrador exterior en la fachada o en la acera del establecimiento para ofrecer sus productos y compensar las limitaciones en el uso de espacios interiores, impuestas por el decreto de estado de alarma.

Desde Cs también se propone la habilitación parcial de calles dispuestas a la circulación de vehículos para la ocupación y explotación temporal de estos espacios por parte de los interesados.

La cuarta medida hace referencia a la articulación por parte del Ayuntamiento de medidas de apoyo para la compra de material de protección – pantallas de metacrilato u otros elementos seguridad y distancia social – para que hosteleros y comerciantes acondicionen sus locales de cara a su apertura.

Por último, como ya se anunció la semana pasada, el Grupo Municipal ha vuelto a solicitar la reducción de tasas de ocupación de vía pública para la hostelería y la restauración, siempre proporcional a las limitaciones impuestas durante las distintas fases del estado de alarma.

La concejala de Cs en San Andrés del Rabanedo, Susana Núñez, ha destacado “la fragilidad y la vulnerabilidad de estos sectores, pese a su gran importancia en la economía española”.  “Hablamos de un sector fragmentado, con márgenes de beneficio muy bajos, con baja capitalización y liquidez”, ha explicado, “por eso creemos imprescindible dar facilidades a estos negocios de cara al inicio de la desescalada”.

A esta situación se suman las limitaciones de las distintas fases del desconfinamiento y un cambio estructural que, como recoge el informe de Ernst&Young sobre el impacto del coronavirus, va a devolver a los españoles a un nivel de actividad similar al de antes de marzo, pero con una demanda reducida y un cambio de hábitos.

Núñez ha advertido que la paralización de la actividad en el sector comercial “ya afecta a muchas familias” y ha afirmado que no sólo hay que dar respuesta a los casos de urgencia y emergencia, “sino planificar los meses posteriores para amortiguar, dentro de nuestras posibilidades, el impacto en la economía local”.

“Son muchos pequeños empresarios y comerciantes de San Andrés a los que esta situación ha dado un vuelco a su vida. Trabajemos con ellos y por ellos para superar esta crisis”, ha concluido.