Desde www.leon7dias nos hemos puesto en contacto con una persona universitaria rusa y nos ha respondido el texto que viene a continuación respecto a la situación de guerra en Ucrania. Es su texto y no hemos querido corregir absolutamente nada por lo que la redacción es la que es.
“El hecho es que muchos de los rusos no apoyan la guerra, pero cada vez hay menos oportunidades de hablar o hacer algo contra la guerra.
Las personas son amenazadas con términos penales, despidos de sus trabajos o, como sucedió con dos canales de la oposición, un cierre total, debido a “no coincidir con fuentes confiables de medios e información rusos”.
La gente le teme a la guerra no menos que los ucranianos (potencialmente pueden reclutar a casi todos en el ejército si se emite el decreto correspondiente, y nadie quiere matar y morir por los intereses egoístas de una autoridad superior).
Al mismo tiempo, hay personas que apoyan completamente lo que está sucediendo (y, como me dijeron mis amigos, también hay personas así entre los ucranianos). Esto probablemente no sea sorprendente: la agenda estatal y la propaganda funcionan mucho más allá de los límites de la televisión, canales, bots, medios que funcionan fuera de Rusia, por ejemplo RT, ideas de odio impuestas por las instituciones públicas, la influencia de los lugares donde pueden trabajar los familiares (estructuras militares, policía, fuerzas del orden) y otros criterios que crean fragmentación en la sociedad, obligando las personas se opongan.
Lo que es peor, tales desacuerdos casi siempre aparecen a nivel familiar, y cualquiera de las acciones a favor o en contra de algo será condenada al nivel más importante y cercano para una persona: sus padres, hermanos, hermanas o hijos.
En otras palabras, no hay muchas perspectivas de influir en la situación desde Rusia, o es necesario esperar a que la situación empeore. Cuando será insoportable (e incluso en este caso no se sabe qué tan alto este nivel).
Personalmente, odio la guerra en general y el mero pensamiento de que mis conciudadanos están muriendo por nada, y matando a otras personas por la misma razón, no provoca nada más que malicia. Creo que algunas personas simplemente no han visto el dolor real, por lo que están ciegos ante la dura realidad.”
