El funcionamiento de la ITV de Onzonilla (León) es el mismo que el utilizado en el pico máximo de pandemia del Covid-19.
Se puede comprobar esta situación con el trato que dan a los usuarios de este centro. Comienzan a trabajar a las siete de la mañana, ya sabemos a temperaturas bajo cero en León. En esta situación hacen esperar al público fuera. No permiten nada más que una persona en su sala de espera para hacer los trámites iniciales. Si alguien pretende entrar cuando hay una persona le dicen con insistencia que salga, que sólo está permitido una persona. Tampoco permiten ir al servicio de la propia sala.
Esto es lo que hay, un desprecio por los usuarios de la instalación, que si dicen, como hemos comprobado, que están incumpliendo las normativas de aforos, que ya se pueden entrar. La respuesta es “aquí no, vaya usted a quejarse al ingeniero responsable”.
Este es el trato que se da a los usuarios de esta ITV actualmente.
Bastaría con estar al día de las normativas de aforos vigentes en Castilla y León, y con ser más amables y respetuosos con los usuarios.
Al salir, una vez realizada la inspección del vehículo, tampoco permiten utilizar la sala de espera de entrega de documentación. Hay que estar también en el exterior.
Nunca se ha caracterizado la ITV de Onzonilla (León) por la amabilidad, sobre todo en la gestión, pero bueno, no se puede pedir que sonrían o sean agradables al hacer los trámites administrativos, pero de ahí al trato actual, hay un buen trecho.
