En 2017 tienen un presupuesto inicial de 300.000 euros, que se podrá incrementar en función de las solicitudes que se registren

El vicepresidente de la Diputación, Francisco Castañón, acompañado por el diputado de Servicios Sociales, José Miguel Nieto, ha presentado esta mañana el balance de las ayudas de urgencia social que la institución otorgó durante 2016.

Castañón señaló que “uno de los ejes de la actividad de la institución provincial son las personas, los leoneses que viven en el ámbito rural. Y dentro de ello, las políticas sociales son una prioridad de este equipo de gobierno. No en vano, alrededor del 26% del presupuesto se destina a políticas sociales”. Así, la institución provincial apoyó a un total de 415 familias leonesas para cubrir sus necesidades básicas de subsistencia y que se encontraban en situación de urgencia, previniendo la exclusión social a lo largo del pasado año.

Estas ayudas, cuyo montante supuso casi 280.000 euros permitieron, entre otras cosas, evitar que diversas familias tuvieran que abandonar sus casas, conseguir evitar la pobreza energética a través de ayudas para pagar la luz y la calefacción, e incluso para cubrir las necesidades de alimentación y/o vestido o equipamientos básicos en las viviendas.  “Este año disponemos de 300.000 euros en el presupuesto para ello, una cifra que, como siempre repite nuestro presidente, se incrementará en lo que haga falta para que todos los leoneses tenga la ayuda de la Diputación para cubrir sus necesidades básicas y evitar la exclusión social”, explicó el vicepresidente de la institución provincial.

En el conjunto de los Servicios Sociales de la Diputación hay 158  profesionales repartidos en 25 CEAS, que  están en disposición de ayudar a cualquier leonés en cualquier rincón de la provincia en cuatro grandes áreas de actuación: atención a las situaciones de dependencia, de protección a la familia, de atención a las mujeres víctimas de violencia de género y de prevención de las drogodependencias.

Por su parte, el diputado de Servicios Sociales quiso hacer hincapié que se trata de ayudas económicas directas, “pero siempre debemos tener clara una premisa: si es necesario aumentar e implementar más dinero, la Diputación siempre estará dispuesta”.

En cuanto a las conclusiones, José Miguel Nieto explicó que casi la mitad de las ayudas concedidas por la Diputación se destinaron a cubrir necesidades de vivienda. De ellas, 138 familias se beneficiaron de los 65.000 euros dedicados a garantizar el suministro eléctrico y la calefacción ante los posibles impagos. Podemos decir que hemos evitado que 138 familias cayesen en eso que ahora se llama pobreza energética.

Además, estas ayudas ha servido para evitar desahucios a través del pago de hipotecas y todo tipo de gastos derivados de la vivienda, a lo que destinamos 26.120 euros; hemos ayudado a que 24 familias dispongan de equipamientos básicos como cocina, lavadora, frigorífico, camas…. E, incluso, la Diputación ha destinado 18.400 euros para la reparación de las viviendas con el fin de que las deficiencias de habitabilidad fueran subsanadas.

Este apoyo para evitar que algunas familias tuvieran que abandonar su vivienda, bien en propiedad, bien en alquiler, también se produjo a través del pago que tenían con la entidad financiera o con el propietario. A ello, se acogieron 44 familias a las que destinamos 28.600 euros. La Diputación de León también colaboró con casi 100 familias para que tuvieran un lugar donde residir a través subvenciones para cubrir el alquiler, bien de un vivienda habitual, bien a un hogar temporal mientras se resuelve la situación. A ello, destinamos casi el 24% del total de los 280.000 euros destinados a la cubrir las necesidades básicas. La otra gran partida se dedicó a los gastos de manutención, higiene y vestido, unas ayudas de las que se beneficiaron 53 familias y a la que dedicamos 40.000 euros.

Además, explicó, “los CEAS se encargan de evaluar, solicitar y, en su caso, hacer un seguimiento de las familias a las que la Junta les concede la renta garantizada de ciudadanía, una ayuda a la que accedieron el pasado año 1612 familias en la provincia”. A su vez, la Diputación dispone del servicio de apoyo familiar y técnico para la inclusión laboral de familias vulnerables y en riesgo de exclusión social. Esta labor de la que se beneficiaron 1653 familias a lo largo del pasado año busca evitar ese riesgo a través de la formación y orientación laboral, conseguir la motivación necesaria y enseñar las herramientas de acceso al mercado laboral como el paso necesario para garantizar esa inclusión social y laboral.