ASAJA de Castilla y León califica de “inoperativa” la política sobre seguros agrarios seguida por la consejería de Agricultura y Ganadería. El departamento no ha sido capaz de retomar una relación de normalidad con Agroseguro para, como se hizo hasta antes de entrar en mora con la compañía los años duros de la crisis, descontar directamente de la póliza la subvención que otorga al seguro agrario el gobierno regional, opción que es la que demanda ASAJA y el resto del sector. La convocatoria que cada año hace la consejería de Agricultura para subvencionar estos seguros se produce varios meses después de suscribir las pólizas, y mientras que el pasado año por estas fechas ya se estaba tramitando la subvención, este año aún no se ha convocado. Esta convocatoria retrasada es la correspondiente a las ayudas al seguro agrario suscrito entre el mes de octubre de 2015 y el 30 de junio de 2016. Respecto a las ayudas a los seguros de recogida y destrucción de cadáveres de animales, la convocatoria que espera el sector es la correspondiente a la ayuda para pólizas suscritas entre el 1 de julio de 2015 y el 30 de junio de 2016.

ASAJA critica el retraso y la complejidad en la gestión de la ayuda, pero también el que se produce en el pago una vez tramitada. Así, los expedientes presentados en enero del pasado año, al amparo de la Orden AYG/1040/2015 de 16 de noviembre, todavía no los han pagado, por lo que algunos agricultores acumulan ya dos años desde que suscribieron la póliza (pólizas de seguro de cereal suscritas en otoño de 2014) sin recibir una compensación que, en el caso de la ayuda del Estado (a través de ENESA), se descuenta directamente en la póliza.

Hasta en el BOCYL faltan a la verdad

El cúmulo de despropósitos es el anuncio el 13 de diciembre, en el Boletín Oficial de Castilla y León, de la “concesión y pago” de la ayuda para la cobertura de los gastos derivados de la retirada y destrucción de animales muertos, de pólizas suscritas en la campaña 2014/2015, indicando ya beneficiario e importe, y al día de hoy ningún ganadero ha cobrado tan siquiera un euro. ASAJA acusa a la consejería de Agricultura de ser mal pagadora y de faltar a la verdad incluso cuando publica las resoluciones en el Boletín Oficial.