(Foto: Isaac Llamazares

La Cultural naufragó en Guijuelo (3-1) contra un equipo que pasó por encima de la peor versión del equipo leonés

Sin gol, sin juego, sin espíritu… sin nada, el equipo de Aira volvió a mostrar la cara de equipo pequeño y deprimido que nunca dio la sensación de poder frenar la caída libre en la que lleva instalada desde hace un mes y medio, y que pudo sufrir una goleada para olvidar
Nada nuevo bajo el sol. La Cultural sigue mostrando los mismos males de los últimos

partidos. Era de esperar. Nadie puede corregir un error sin ser consciente de haberlo cometido. Y para Aira la Cultural había jugado bien en sus últimos encuentros. Nada que cambiar, entonces. Y la Cultural no cambió. Salió timorata, confiando en la calidad de los

jugadores para solventar un partido en el que el juego colectivo seguía dejando mucho que desear. Y sin gol, sin juego, sin espíritu… sin nada que salvar el final sólo puede ser el desastre. Por suerte, con tiempo para frenar la caída libre… si alguien es consciente de su caída. Porque en Guijuelo, diga lo que pueda decir Aira tras el partido, sólo se pueda salvar a Leandro. Y cuando el portero es el mejor…

El Guijuelo no hacía un fútbol excelso, pero salvo un cabezazo de Héctor Hernández, el resto de ocasiones de peligro eran de los locales a quienes sólo les faltaba el gol. Y lo que no tenían iba a llegar por partida doble en apenas dos minutos con Pablo Espina sacando los colores a la zaga culturalista.

El equipo de Aira estaba recordando a su peor versión de la temporada, aquella que tocó fondo en Logroño. Habrá que esperar que, como entonces, cuando aquel hundimiento fue el preludio de los mejores momentos del equipo en esta temporada, ahora suceda lo mismo, pero el aroma que está dejando el equipo no es el mismo.
El 2-0 obligaba a algo más y tras el descanso, en el que Aira cambió de dibujo y metio más pólvora. Y cambiaron las cosas, pero durante cinco minutos en los que la Cultural sí fue ese equipo que quiere ver la afición leonesa, dominando al rival. Forzó un par de saques de esquina, pero ahí se acabó el fuelle de la Cultural que volvió a dejarse dominar por un Guijuelo que a favor de obra llegaba con peligro. Salvó Leandro dos claras llegadas de los chacineros, pero el tercer regalo de los leoneses lo volvió a aprovechar Pablo espina para convertirse en trigoleador y desesperar a los culturalistas que se metieron la stres horas de viaje en el cuerpo para animar a un equipo que no demostraba serlo.

Entró Sergio Benito por un Dioni Villalba que no había tocado el balón en todo el partido. Era el último intento de Aira por dar la vuelta al sino del encuentro. Pero a veces no es problema de nombres, ni de acumular jugadores en ataque sino de espíritu y de actitud. Y la de la Cultural sigue dando la sensación de ser un equipo pequeño. El Ferrari que

compraron en verano se ha gripado a base de tanto rodarlo en segunda y sin pasar de 30 por hora y cada vez queda menos tiempo para ponerlo a punto antes de que sólo quede el remedio de llevarlo al desguace.

El final del partido fue evocador de la situación que atraviesa el equipo de Aira. Una impotencia que duele. Un querer y no poder. Y ni siquiera queda el consuelo de lamentar la falta de ganas de los jugadores que parecen más perdidos por no saber qué tienen que hacer que por falta de ganas de hacerlo. Perdiendo 3-0 las mejores ocasiones fueron de los locales -con Leandro evitando que la goleada asara de dura a sonrojante- hasta que el árbitro señaló el camino hacia el vestuario.

Final sin puntos, ni goles. Lo único que invita al optimismo es que quedan muchas jornadas para cambiar la cara al equipo. Pero para atajar un problema hay que ser consciente de que existe.

La ficha del partido
3 Guijuelo: Guille Vallejo, Iván Pérez, Jesús Muñoz, Jonathan Martín, Carlos Rubén, Cristibal, Yassin Fekir (Julien Fernandes, m. 85), Pablo Espina (Urko Vera, m. 67), Pepe Carmona (Luis Lara, m. 78), Andi Bogdan y Dani Hernández.

1 Cultural: Leandro, Ángel Moreno, Virgil, Héctor Rodas (Dani Pichín, descanso), Julen Castañeda, Eric Montes, Alfonso Martín (Kawaya, descanso), Menudo, Julián Luque, Héctor Hernández y Dioni (Sergio Benito, m. 66).

Árbitro: Pardeiro Puente. Amonestó al local Pablo Espina.
Goles: 1-0 (m. 36): Pablo Espin. 2-0 (m. 37): Pablo Espina. 3-0 (m. 65): Pablo Espina. 3-1 (m. 86): Jesús Muñoz, en propia puerta.
Por César F. Buitrón