Tras una pretemporada extraña en cuanto a fichajes y con el nombre de Fernando Hierro en el banquillo, el Real Oviedo no ha comenzado bien su segunda campaña consecutiva en la Segunda División.

Tras el declive de final de temporada del año pasado, parece que los azules siguen en la misma línea. Con muchos cambios en el equipo, los fichajes no terminan de acoplarse con los compañeros que ya estaban y tampoco entienden el planteamiento que propone Hierro. Tras la derrota inicial en Valladolid, el Oviedo encadenó dos partidos sin recibir gol, una victoria 2-0 ante el Almería en el Tartiere y un empate en Mallorca 0-0, hacían presagiar un conjunto compacto y sólido. Pero llegó la Copa del Rey y todo se torció. En la vuelta de Michu, que hizo dos goles, los carbayones se permitieron el lujo de encajar cuatro goles ante el UCAM, lo que les eliminó de la competición. Otra vez los fantasmas volvían a aparecer. Tras esta dura derrota, llegó el Mirandés al templo azul y sacó un empate sin goles en un partido calamitoso de ambos equipos. Tres partidos de cinco sin encajar gol no es mala cifra pero el problema viene cuando apenas creas peligro en el área rival. Así se presentaba el Oviedo en Getafe ante un equipo que no conocía la victoria. Tras una decente primera mitad en la que se fueron con ventaja, los madrileños les menearon en la segunda parte dándole la vuelta al marcador. Esto deja a los asturianos en el puesto dieciocho de la clasificación, rozando la ‘red zone’ y con unas sensaciones nada halagüeñas para sus seguidores. Fichajes llamados a ser claves como Jorge Ortiz, procedente del Fuenlabrada, todavía no han debutado con sus compañeros por lesión y en cuanto vuelva supondrá un plus para el conjunto azulón. La marcha de Diego Cervero, ídolo de masas y corazón puro en el campo y fuera de él, se nota y mucho. En más de un partido, con él en la cancha, todo habría sido diferente.

Mucho tiene que cambiar el equipo si quiere aspirar al ascenso directo, ese es el objetivo que uno de los históricos de nuestro fútbol debe de tener, ninguno otro. Playoff sería el premio de consolación aunque dependería del resultado final en el mismo. El Real Oviedo debe aspirar a todo.

 

Juan Lorenzana Prieto @juanlp91

Foto: Youtube