Y… seguimos caminando juntas. Un día, un día te levantas y te dices asombrada, tengo veinticinco años, tengo veinticinco años más. Pues eso, eso es lo que le ha pasado a nuestra asociación, a la asociación “Ribereñas del Órbigo”. Por eso digo:
Hoy me he levantado, he reflexionado / he dado las gracias a las Ribereñas, /
que nos han cuidado. / Seguimos caminando juntas, celebrando la vida, / que nos ha unido en esta larga travesía. / Seguimos caminando juntas, tejiendo una manta / de horas, de hombros unidos, de risas.
Dicen que es de bien nacidas el ser agradecidas y hoy aquí, quiero agradecer a todas las mujeres que con su tiempo, dedicación, talento y ganas, han traído hasta este momento tan hermoso, una asociación “Ribereñas del Órbigo” que, como que no quiere la cosa, ha recorrido un camino de veinticinco años. Lo hemos recorrido en días buenos y menos buenos, pero: Hoy me he levantado, he reflexionado / he dado las gracias a las Ribereñas, / que nos han cuidado. / Seguimos caminando juntas, / vestidas con la gracia, / de la amistad, de la compañía, de la ayuda. /Seguimos caminando juntas, dejando las huellas / que otras continuarán.
Es muy fácil pertenecer a una asociación en la que los miembros de la directiva están pendientes con su trabajo de las necesidades e inclemencias que se dan a lo largo de una trayectoria de veinticinco años. En especial para todas las que estáis y habéis estado en esos puestos difíciles e incómodos, va una gratitud tan merecida como necesaria. Muchas gracias compañeras por vuestra entrega. Por vosotras precisamente:
Hoy me he levantado, he reflexionado / he dado las gracias a las Ribereñas, / que nos han cuidado / Seguimos caminando juntas, aligerando la carga / que a veces hay que soportar. / Seguimos caminando juntas. / Seguimos siéndonos todas en cada una.
/ Hoy me he levantado, he reflexionado / he dado las gracias a las Ribereñas, / que nos han cuidado.
Este texto está dedicado a todas y cada una de las socias pertenecientes a la asociación “Ribereñas del Órbigo” por su vigésimo quinto aniversario.
Neuronada: Si el ser humano llegase al 3.023, como venimos elucubrando en todos los episodios de “El hogar de la vida”, es muy posible, que una asociación como “Ribereñas del Órbigo”, sea un ejemplo a seguir. Esta asociación de mujeres es un hogar para sentir la energía, la compañía y la empatía de tus semejantes, es un refugio donde compartir emociones, ayuda y también felices momentos. Que se cumpla su vigésimo quinto aniversario, es para celebrarlo con una gran fiesta. Y eso fue lo que se vivió el pasado sábado 6 de mayo en la sede de la asociación “Ribereñas del Órbigo. Se vivió una gran celebración llena de detalles, recuerdos, reconocimientos, alegría y baile. Fue una celebración entrañable y bella. A por otros veinticinco años “Ribereñas del Órbigo”. Gracias por la entrega.
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.
