En la distancia social que separa a quienes duermen en la calle de los que lo hacen bajo un techo está la caridad de entidades sociales como la gran cantidad que formamos el Tercer Sector en la provincia leonesa, eso, si el Tercer Sector de las asociaciones pequeñas, esas que no estamos declaradas de utilidad pública pues nuestros pocos recursos los tenemos que destinar a los usuarios que en muchos casos son nuestros vecinos, amigos, especialmente en el medio rural. «En nuestra mano está dar un hogar a quienes la sociedad  y las administraciones, ha dado la espalda», dice Belén Aren, Presidenta de la Asociación Activos y Felices y dinamizadora de la nueva Plataforma de Entidades Sociales del Medio Rural en España. Con tristeza reconoce que podría hacer más pero a menudo se cortan las alas a la caridad y esto hace que las asociaciones estemos cayendo una tras otra, por falta de  atención y reparto justo de los recursos por parte de Todas, y cuando digo Todas, quiero decir Todas las Administraciones”

¿Cómo puede ser que un Ayuntamiento tenga convenio con una entidad de gran ámbito de actuación y no esté dotado de una partida presupuestaria? Eso sí, las grandes todas tienen convenio.

¿Cómo puede ser que los mayores de la ciudad de León, solo tengan 5000 euros de presupuestos para las asociaciones que trabajan día a día velando por su bienestar?

 

«Últimamente tenemos algo de problema con DIPUTACION DE LEON ya que  su equipo no sé si social o de intervención  ha pensado que las entidades sociales somos entidades financieras”. Sus subvenciones son injustificables, haciendo que la mayoría de la organizaciones no nos podamos presentar, pero además tenemos que tener dinero de remanente para poder ejecutar el proyecto, cuando tras la pandemia hemos agotado todos los pocos recursos económicos que nos quedaban en nuestras arcas”

«No se puede trabajar ante una situación tan incierta, muchas entidades tienen trabajadores, la nueva Ley de Empleo tampoco es nada clara en lo que a la contratación y despidos de las organizaciones sin ánimo de lucro se refiere.  

Desde la recién creada plataforma  reclaman mayor estabilidad para poder gestionar de la manera más eficiente los recursos que disponen especialmente las entidades sociales más pequeñas y con mayor implantación en el medio rural. Consideran que los constantes cambios en los que van derivando los acontecimientos sociales, se va a producir un considerable aumento de la pobreza, aumento de la soledad por parte de los mayores, nos preocupa mucho la salud mental, el maltrato en todos sus ámbitos, la injusticia financiera con los mayores, su utilización como números para evitar el analfabetismo digital…y crear convenios inútiles.

«Nosotros tenemos necesidad de tener unas condiciones fijas, no pueden ser tan volubles, no es lo mismo organizarnos para 200 personas que para 1500. 

Y contando con el personal al que tampoco podemos tirarlos a la calle porque aunque funcionemos con épocas de mayor o menos actividad. ¿qué hacemos si en unos meses vuelven a demandar nuestros servicios nuevos usuarios?  Las asociaciones pequeñas generamos y queremos generar empleo, atendemos personas, sin color ni bandera y nuestros voluntarios junto a los  trabajadores son nuestro principal activo. 

La crisis del coronavirus tampoco ha puesto las cosas fáciles para las entidades sociales y asociaciones de ayuda a todo tipo que han tenido que reformar los servicios que ofrecían, reducir aforos en los centros además de implementar las medidas higiénicas y el personal pero contando con unas cuentas ya de por sí ajustadas. Por este motivo, “reclamamos a las administraciones una nueva mirada, y una nueva forma de organizar los recursos sociales, pues ya nada volverá a ser igual”

Por un lado la creación de la Plataforma de Entidades Sociales del Medio Rural de España y por otro un mejor reparto de los recursos sociales, una nueva forma de acceder a las subvenciones especialmente de la Diputación de León y permitir el acceso a convenios de todo tipo de entidades que demuestren su capacidad para realizar un proyecto podría evitar incluso enfrentamientos legales “porque no vamos a dejar de atender a nuestros usuarios y ahora, por primera vez, nos estamos uniendo en la defensa  y los derechos de los más vulnerables. 

Para finalizar, “queremos que la PTSCyL nos represente a todos y que las entidades pequeñas especialmente las del medio rural puedan formar parte de la toma de decisiones, así como tener los mismos derechos a las adjudicaciones de las subvenciones de la Junta de Castilla y León, no queremos migajas, nos están cercando, ahogando…”.

Una “llamémosla anécdota miserable…” como manifestaba la presidenta de Activos y Felices al principio, el Ayuntamiento de León solo destina 5000 euros para más de diez asociaciones, hagan números, este años, dos macro entidades, a las que prefiero no nombrar,  con subvenciones directas en todas administraciones, entidades perciben millones y millones de aportaciones económicas, “sin duda merecidas eso no lo cuestionamos, pero si cuestionamos que se presentan a una subvención irrisoria para percibir 300 euros, cantidad que una entidad pequeña hace maravillas con ese dinero… por favor un poco de complicidad entre las entidades sociales” reclama Belen Aren. 

No queremos que nos digan lo que tenemos que ser, sino que miren lo que sabemos hacer, adonde llegamos, quienes son nuestros usuarios…

“Gente pequeña haciendo cosas pequeñas pueden cambiar el mundo”, con esta frase Belen Aren deja claro que “la unión hace la fuerza, y ha llegado el momento de mostrar la fuerza de los pequeños y el derecho a gestionar sus recursos con legalidad, transparencia pero sin que nos digan cómo y de qué manera tenemos que llamarnos”.