Por primera vez en la historia del yacimiento, el ILC da inicio a unos trabajos de consolidación, accesibilidad y recuperación de los niveles originales con el propósito de hacer visitables y comprensibles los restos de la ciudad astur-romana

La intervención cuenta con un presupuesto de 150.000 euros e incluye la señalización de las distintas áreas con gravillas de diferentes colores, la reconstrucción del antiguo hipocausto y la colocación de una columna original

Los trabajos ya han comenzado y tendrán una duración de dos meses

“Este verano, Lancia saldrá de una vez por todas de su abandono”. El diputado de Cultura, Arte y Patrimonio, y vicepresidente del Instituto Leonés de Cultura (ILC), Pablo López Presa, se expresaba así ante el inicio de los trabajos de restauración y puesta en valor del famoso yacimiento arqueológico, una serie de actuaciones nunca antes llevadas a cabo en los restos de esta antigua ciudad astur-romana ubicada en el término municipal de Villasabariego.

Se trata de unas obras de consolidación y de accesibilidad al público que son las de mayor envergadura desde que Agustín Blázquez y Francisco Jordá comenzasen a excavar, con métodos científicos, la zona nuclear del yacimiento a lo largo de los años cincuenta del pasado siglo. Los trabajos se centrarán en la parte de La Encrucijada, la más importante y representativa de la ciudad romana en la época de su esplendor, aunque también se encuentran en ella algunos restos tardorromanos.

En concreto, la intervención consistirá en la limpieza general del yacimiento, con la retirada de los elementos vegetales que lo cubren, y en la recuperación del nivel original de los suelos en todos los espacios y estancias de origen romano, pero también se procederá a la recreación del hipocausto (sistema calefactor del suelo) de las termas, y a la reintegración, en su lugar original, de una columna que llevaba décadas almacenada en los depósitos del ILC y que en su día se alzó en el patio central del macellum, o mercado cubierto, de Lancia. Y es que tanto el mercado como el foro, dos de los espacios más relevantes de la ciudad, se encuentran en el área de La Encrucijada, de ahí que otra de las actuaciones consistirá en marcar, con gravillas de diferentes colores, este tipo de áreas para poder ser diferenciadas visualmente. Por otro lado, se trazará una senda perimetral a lo largo del espacio excavado con objeto de permitir y de mejorar tanto el acceso de los visitantes como la contemplación general de todo el conjunto arqueológico.

“En esencia, se trata de dignificar el yacimiento. Hasta ahora la actividad en él se había limitado a excavaciones e intervenciones de tipo arqueológico, pero se habían llevado a cabo muy escasas iniciativas encaminadas a que el público general pudiese visitar y comprender los importantes vestigios de Lancia”, expresó el diputado de Cultura, Pablo López Presa, quien además recalcó que estas intervenciones servirán asimismo para impedir el deterioro de los restos visibles, recuperándose la volumetría de algunos de los muros. “Por fin, el yacimiento será abordado desde un punto de vista divulgativo”, expresó el diputado, quien visitó los preparativos de las obras junto al coordinador de Proyectos del Instituto Leonés de Cultura, Emilio Gancedo, y la alcaldesa de Villasabariego, Esther García Reguera.

Los trabajos cuentan con un presupuesto aproximado de 150.000 euros y tendrán una duración de dos meses. La obra será realizada por la UTE de las empresas especializadas: Patrimonio Inteligente S.L. y Patrimonio Inteligente Castilla y León, con la dirección del arquitecto Ramón Cañas y la supervisión arqueológica de Jesús Celis, técnico del ILC; ambos asimismo presentes en la visita.