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Hace casi veinte años, el Gobierno de España declaró la Semana Santa de León de Interés Turístico Internacional, con especial mención a la Ronda que recorre la ciudad la noche de Jueves Santo y la Procesión de los Pasos, que desfila la mañana de Viernes Santo.

Motivos, sobraban.

Por su valor, por su antigüedad, su perdurabilidad en el tiempo, su inmejorable legado artístico y cultural, su arraigo y, por su puesto, su variedad en los actos. Además, y aunque no lo recogía textualmente el decreto, por la imbricación en la ciudad y la participación mayoritaria de las familias leonesas.

Casi veinte años después de esta declaración, la Semana Santa ha ido sumando condiciones para consolidar esta declaración y para engrandecer un acontecimiento que va, por supuesto, más allá de un solo aspecto.

Las pruebas a las que nos ha sometido la pandemia en estas dos últimas ediciones y la fuerza con la que, ya, están viviendo las diferentes cofradías y hermandades, esta Semana Santa 2021 nos confirma que León tiene en sus actos sacramentales y procesionales un referente que perdurará, trasladando el mensaje de cinco siglos de antigüedad, a las generaciones futuras, cada vez con más fuerza y contenido.

En las últimas semanas, hemos asistido ya a los primeros actos de una Semana Santa que, como hemos señalado, será muy, muy diferente. Contenida y recia.

Triste, sí.

Triste por los hermanos y hermanas que nos han dejado, por los enfermos aún, y por no poder vivir este momento tan esperado que nos une a todas y todos con los lazos invisibles de la fe, la tradición y la fraternidad.

Pero estas circunstancias no impedirán que la Semana Santa de León siga siendo uno de los acontecimientos más señalados, grandes e importantes de nuestra ciudad.

Y lo será porque en ellos se implican hermanos y hermanas, cofrades, abades y abadesas que viven durante todo el año por y para la Cofradía, por y para la hermandad.

Xuasús González, nuestro pregonero, es uno de esos hermanos que vive la Semana Santa todas las semanas del año.

Y lo vive como hermano, la más pura forma de vivirlo, pero también como estudioso, escritor y, por supuesto, difusor. Nacido en el Bierzo, hijo predilecto de la localidad de Losada, Xuasús es uno de los mayores expertos actuales en la pasión leonesa, a la que se ha acercado de todas las formas posibles: como papón, como músico, como fotógrafo o como escritor, primero en La Horqueta Digital, de la que fue coordinador o bracero mayor entre 2005 y 2010, y luego en colaboraciones con todos los medios y formatos. Es autor de distintas obras sobre la imaginería, la música y la pasión leonesas.

Licenciado en Historia, es, ante todo, un apasionado de la comunicación que ha abordado desde todos los puntos y medios, especialmente como difusor de lo cofrade, de la que sobresale su participación en la «Biblioteca Básica de la Semana Santa Leonesa», publicada por el periódico Diario de León en 2009, y el libro «La Semana Santa de León, de ayer a hoy», editado en 2018 por el periódico La Nueva Crónica.

En este medio de comunicación, además de ser uno de sus columnistas de opinión, se encarga de la coordinación de su suplemento semanal semanasantero, «LNC Cofrade», desde 2018.

Hermano de cuatro cofradías es, por tanto, una persona entregada a la pasión por la Pasión.

Ha sido pregonero de la Semana Santa en Mansilla de las Mulas (2002), Olleros de Sabero (2006) y Villafranca del Bierzo (2019) y, ya en la capital leonesa, pregonero cofrade de La Horqueta (2014) y co-pregonero del XXV aniversario de la Bienaventuranza (2016), habiendo sido designado pregonero de la Semana Santa de León el pasado año 2020, acto que tuvo que ser suspendido por la declaración del Estado de Alarma.

También ejerció como mantenedor de la Ronda Lírico-Pasional del Desenclavo en 2016 –y comantenedor en su 25ª edición, en 2018–, y ha participado en sendas rondas lírico-musicales «La ruta de los conventos» en 2011 y 2017, entre otras intervenciones.

Gracias a personas como nuestro hoy pregonero -que se han ido dando el relevo año tras año- seguimos adelante con esta muestra inequívoca de tradición y cultura que son nuestros actos semanasanteros y para los que, cada año, se recuperan nuevos vocablos, ceremonias o herencias.

Nuestras cofradías, las seculares distinguidas por la ciudad de León con el máximo homenaje hecho Medalla de Oro de la Ciudad o las llegadas en las últimas décadas, consolidadas, confirmadas y bendecidas, son sin duda un eje central para entender cómo somos, cómo fuimos y, sin duda, cómo seremos los leoneses dentro de unos años.

Porque estoy seguro de que seguirán ahí, que este legado no lo perderemos, como lo demuestra el fervor con que esperamos estas fechas, conscientes desde hace meses que no podríamos vivir una semana santa como las anteriores.

El dolor del pasado año por la suspensión de todos los actos, no se nos olvidará, como no lo harán las circunstancias en las que estamos viviendo esta Semana, pero siempre tendremos el consuelo de la unión ante esta adversidad.

Quiero destacar el apoyo que, desde el primer momento, hemos recibido por nuestro nuevo obispo Monseñor Luis Ángel de las Heras que, creo, en solo dos meses se ha empapado de la Semana Santa de León y es ya un ferviente defensor de ella. Tenemos, ya, un nuevo escenario para, cuando podamos, celebrar y conmemorar, el Museo Diocesano y de Semana Santa es ya una realidad tras tantos años de anhelo.

Esperamos, y por ello oramos, que el próximo año salgamos a nuestras calles, celebremos nuestros actos, y tengamos eso que ahora todos anhelamos, salud y normalidad.

Pero, mientras ese momento llega, demos la palabra al pregonero Xuasús González que, sin duda, nos explicará porque la Semana Santa Leonesa nos une y nos unirá siempre.

José Antonio Diez Díaz

Alcalde de León