• Tras esta primera fase formativa, casi la mitad de los alumnos serán contratados para completar su introducción laboral en este sector.

Un total de 42 alumnos, todos ellos de Madrid, han superado la primera fase formativa del Programa #include de empleabilidad en ciberseguridad para personas con discapacidad, impulsado por el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) y la Fundación GoodJob.

Tras un proceso de selección en el que ha colaborado la Consejería de Economía, Empleo y Competitividad de la Comunidad de Madrid, los participantes han recibido durante 5 semanas formación intensiva de profesionales voluntarios de INCIBE, de las empresas #includeR Atos, Eleven Paths y Telefónica y de otras compañías colaboradoras como Cisco, Fortinet, Microsoft, Palo Alto y Revista SIC, con la coordinación académica de Román Ramírez de RootedCon, en contenidos de ciberseguridad general, ciberseguridad perimetral y diversas tecnologías.

Tras esta formación, las empresas #includeR altamente comprometidas con el empleo de este colectivo, y otras compañías como Botech, Capgemini y S21sec se han comprometido a contratar a varios alumnos en diferentes puestos de trabajo, a partir de este mes de julio, para completar así su introducción laboral en el sector de la ciberseguridad.

El 64% de los participantes en esta primera fase tienen entre 26 y 45 años, el 41% han sido mujeres y 7 de cada 10 alumnos han cursado estudios de Formación Profesional y superiores, no relacionados con la tecnología o la Ciberseguridad.

Esta iniciativa forma parte de las acciones que INCIBE lleva a cabo para impulsar la formación en ciberseguridad, despertando vocación e interés por una profesión en auge y con salidas profesionales. Según Rosa Díaz, directora general de INCIBE, “se enmarca además en la estrategia de INCIBE de extender la concienciación en ciberseguridad a empresas, menores y ciudadanos, entre los que se incluyen las personas con discapacidad o aquellas en riesgo de exclusión social”.

En palabras de César López, director general de la Fundación GoodJob, “este programa da respuesta a dos necesidades no cubiertas, por un lado, la demanda de profesionales cualificados en el sector de la ciberseguridad y, por otro lado, la incorporación al mercado laboral de personas con discapacidad en un sector de alto valor añadido”. Añade que, “el éxito de este programa se debe en gran medida a la colaboración de INCIBE y al compromiso por la capacitación y la integración de este colectivo en la actividad de ciberseguridad por parte de algunas de las empresas más relevantes del sector, por lo que estamos convencidos de que el resto de las empresas, querrán sumarse a esta ambiciosa iniciativa”.

En septiembre comenzará una segunda fase formativa en la que se espera que colaboren nuevas empresas que garanticen la inserción laboral de los participantes en sus compañías. La convocatoria estará dirigida a otros 50 participantes con algún tipo de discapacidad de Madrid, Castilla y León y Cataluña.

Sobre la colaboración de INCIBE y la Fundación GoodJob

INCIBE y la Fundación GoodJob desarrollan conjuntamente el Programa #include de empleabilidad en ciberseguridad para personas con discapacidad, sin formación específica previa y gratuito para los participantes.

El objetivo del acuerdo es crear puestos de trabajo para personas con discapacidad en empresas ordinarias, dentro del ámbito de la ciberseguridad, identificando y proporcionando las capacitaciones necesarias a este colectivo, teniendo en cuenta diferentes niveles de empleabilidad, necesidades de apoyo y tipos de puestos de trabajo a desempeñar.

A través de este acuerdo, INCIBE asume la elaboración del programa formativo, así como una parte de la gestión del programa y la logística para la correcta impartición de la formación. Además, desde INCIBE se impulsa el programa, actuando como catalizador de todos los apoyos institucionales, relacionados con la Administración Pública y el mundo de la empresa; se asesora en materia de ciberseguridad al equipo de gestión del programa durante su desarrollo; se ofrece apoyo, y en su caso aportación, en la creación de contenidos y/o parte del profesorado de la fase de formación y se difunde la iniciativa en foros afines al objetivo que se persigue.

El programa consta de tres fases, a partir del proceso de selección de alumnos, con una duración máxima de un año.