El déficit de la Seguridad Social, que desde 2007 ha perdido un 10% de afiliados, es ocho veces mayor que en España, en una provincia envejecida y con alta tasa de dependencia.

Un trabajo realizado por la Coordinadora del Máster en Ciencias Actuariales y Financieras (MUCAF) de la Universidad de León (ULE), Mª Carmen González Velasco, y por José Enrique Devesa Carpio, profesor de la Universidad de Valencia y uno de los mejores conocedores del sistema de las pensiones en España, ha analizado en profundidad la situación de León respecto a su Comunidad Autónoma y al resto de España, utilizando para ello los parámetros principales de la Seguridad Social (número de afiliados y de pensiones de jubilación y su cuantía media), y el resultado ofrece un panorama muy preocupante.

En primer lugar, destaca la gran tasa de dependencia demográfica (calculada como la relación entre la población mayor de 65 años y la población que está en edad de trabajar, entre 16 y 64 años). Si en España la tasa es del 29’6% y en la Comunidad de Castilla y León del 41%, en León alcanza un 43’9%. Además, se trata de datos que, como se puede apreciar en el siguiente gráfico, se mantienen y van creciendo desde el 2008, lo que constituye un grave problema que se está perpetuando ya que, según explican los autores del estudio, “la tasa debería estar alrededor del 24% para acercarse al equilibrio contributivo del sistema de pensiones en León”.

Es preciso anotar que el estudio se ha centrado en el periodo 2007-2019, por lo que los resultados serán aún peores cuando se incorpore el efecto que está teniendo sobre la economía el estado de alarma provocado por la pandemia de Covid-19.

EL DÉFICIT DE LEÓN ES OCHO VECES MAYOR QUE EL DE ESPAÑA Y DOBLA EL DE CyL

La tasa de dependencia no solo es un indicador del envejecimiento de la población, sino que, según aclara Enrique Devesa, “es la variable que mejor explica el saldo de la Seguridad Social calculado sobre el Producto Interior Bruto (PIB), ya que cuanto mayor es dicha tasa más elevado es el déficit”.

Los datos que presenta el estudio señalan que el déficit sobre PIB era en España en 2018 de 1’55%, cifra que se eleva hasta el 4’81% en la comunidad autónoma, y se dispara hasta el 9’75 en el caso de León.

Finalmente hay que apuntar otro factor de gran importancia, como es el número de afiliados a la Seguridad Social, aspecto en el que León también se encuentra en una difícil situación, que previsiblemente será aún peor cuando finalice la desescalada y la economía afronte la ‘nueva normalidad’.

“Entre 2007 y 2019, -comenta Mª Carmen González Velasco-, León perdió más de un 10% de afiliados y pasó de 177.200 a 158.349. Castilla y León perdió un 5% de afiliados, al pasar de 969.600 a 919.085, mientras que España mejoró ligeramente el total de afiliados, un 0,2%, al pasar de 19.152.300 en 2007 a 19.189.213 en 2019”.

LLAMAMIENTO A LAS AUTORIDADES

En el apartado de conclusiones, y tras reflejar el delicado estado de la economía leonesa, los autores del trabajo confían en que su análisis “sirva para que los responsables políticos se den cuenta de la situación tan preocupante en la que se encuentra la provincia de León con respecto al resto del país”.

En opinión de González Velasco y Devesa, “si no se toman medidas urgentes, León tendrá aún mayores problemas de envejecimiento de la población, lo cual repercutirá en la Seguridad Social y en el sistema público de pensiones”.

Una de las soluciones que proponen va en la dirección de fomentar la creación de empleo de calidad, sobre todo para las personas jóvenes, con el consiguiente incremento de las afiliaciones a la Seguridad Social, “esa sería nuestra principal recomendación derivada de este estudio”. En su opinión, se deberían llevar a cabo medidas para incentivar la inversión empresarial atractiva para León, ya que se debe diversificar la industrialización en España para que no haya desigualdad entre las regiones.

“Por poner un ejemplo, -concluye González Velasco-, se cerró Caja España y debería haberse buscado un sustituto del mismo sector, como un área financiera o actuarial de alguna entidad financiera española, y más teniendo en la Universidad de León un Máster Universitario en Ciencias Actuariales y Financieras, y un Grado en Finanzas, pero no dejar morir las empresas y no buscar alternativas, que es lo que se ha hecho”.