En el día de ayer recibimos una fotografía en este medio procedente de la Federación de Caza en la que se veían los cuerpos ahogados de 31 corzos en el canal de Los Payuelos de León.

La noticia no es nueva, pero los datos son exagerados en estos momentos, 31 corzos en un solo día en un pequeño tramo del citado canal. En León hay muchos más canales abiertos y sin protección.

La Consejería de Medio Ambiente debe tomar medidas al respecto, ha de protegerse a los animales que caen en los canales. No sirven sólo buenas palabras en las campañas electorales, hay que tomar soluciones. Aseguran desde la Federación de Caza.

Los animales en la mayoría de los casos se recuperan ya ahogados, con las pezuñas destrozadas y sangrantes por el esfuerzo de intentar salir de los canales, aventura que es imposible.

Son necesarias soluciones ¿Cuáles? Hay varias:

  • Hacer pasos de fauna salvaje por encima o por debajo de los canales.
  • Soterrar los puntos más peligrosos.
  • Hacer en los canales rampas, topes o cuñas que permitan a los animales poder salir de estas trampas mortales.
  • Vallar los canales.

El peligro es principalmente para los animales, que no lo ven. También ha habido personas que se han ahogado en estos canales de riego o de suministro de agua a las ciudades.

Es también el momento de que los movimientos ecologistas y los cazadores remen en la misma dirección que es como deberían haber hecho siempre, ya que sus objetivos, aunque pudiera parecer lo contrario, son comunes. La protección de la naturaleza y la fauna salvaje.