Clotilde, la vecina de Hala y Mazem, está muy limitada de movimientos por el avance de su artrosis. Su hija Julia ha solicitado una cuidadora hace varios meses, pero no han recibido respuesta y Clotilde ya no puede hacer muchas de las tareas de la casa. Julia se va al trabajo cada día tranquila ya que gracias a Hala, la vecina de enfrente, su madre está atendida.
Aunque Hala trabaja en casa, cocinando para una empresa de catering, sienta a Clotilde en su cocina, y hasta la hace sentirse útil, ya que deja que pele patatas, pique ajos, todo lo que pueda hacer sentada. Clotilde está encantada en casa de Hala, además recibe cariño y respeto. Hala le recuerda cada día lo bien que se portaron ella y su hija desde el primer día.
– ¿Cómo decís aquí ese refrán… de que es bien nacido?
– Clotilde se ríe: “Es de bien nacidos el ser agradecidos”.
-Eso quería decir. Creo que entre nosotras ya hay lazos tan fuertes como si fuéramos familia. A decir verdad, sois la única familia que tenemos, la guerra nos dejó sin nuestros seres queridos.
-No te pongas triste con estos recuerdos, que eso repercute, aunque no lo creas, en la comida que estamos preparando. Todos hemos tenido temporadas malas en la vida. Para mi eres como una hermana pequeña y te agradezco mucho lo que estás haciendo por mí, pero también por Julia, que así se va a trabajar feliz.
Mordida existencial: Cuando se va cumpliendo vida, aunque la salud nos haya respetado, nos damos cuenta de que la agilidad, los reflejos, los movimientos…, van siendo cada vez más calmados y lentos.
Pero si padeces alguna enfermedad que te limite, entonces las cosas cambian, ya no puedes, en ocasiones hacer las tareas mínimas. En 2006 nació una norma estatal para financiar la dependencia, que aún no está del todo definida. Ahora entre crisis y gobiernos en funciones, la precariedad de la dependencia, ha impulsado a muchas familias a contratar cuidadoras por su cuenta. Pero… ¿Y qué pasa con tantas personas a las que su economía no le llega? ¿O con las que no tienen hijos o están solos?
Nuestros mayores nos han traído hasta aquí, nos han dado la vida y su sabiduría. Son nuestra memoria, debemos ofrecerles un presente digno.
Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.
