La Estación de la Carne, perteneciente al Instituto Tecnológico Agrario, se encargará de evaluar la calidad y viabilidad del ‘centro de contra’ y el ‘redondo’, dos partes del vacuno que permitirían aumentar en más de un 20 % la producción de cecina de esta Indicación Geográfica Protegida y sumar más empresas a este marchamo. Este año se espera cerrar con una cifra récord de producción llegando a las 90.000 piezas cuyo valor económico superaría los 11 millones de euros.

La consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, y el presidente de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Cecina de León, José Luis Nieto, han firmado esta mañana un convenio de colaboración mediante el cual la Estación Tecnológica de la Carne, perteneciente al Instituto Tecnológico Agrario (Itacyl), se encargará de evaluar dos nuevas partes del vacuno con el objetivo de incluirlas dentro de este marchamo de calidad. Se trata del ‘centro de contra’ y el ‘redondo’.

Así, si los estudios demuestran la calidad y la viabilidad de la incorporación a la IGP de estos dos cortes, la producción avalada podría aumentar más de un 20 % y sumar nuevas industrias a este sello, que cuenta en la actualidad con diez empresas.

Hasta la fecha, y desde que nació la Indicación Geográfica Protegida Cecina de León en 1994, solo se contemplan para la elaboración de este producto cuatro piezas de vacuno: babilla, tapa, cadera y contra. Este marchamo de calidad ha tenido, desde sus inicios, una clara evolución ascendente en cuanto a producción. En 2015 se produjeron más de 54.000 piezas y este año se espera que se convierta en uno de los mejores, rondando las 90.000 piezas, lo que podría alcanzar un valor económico superior a los 11 millones de euros.

Este incremento es el resultado de una firme apuesta por la promoción del Consejo Regulador, que en lo que va de año, entre catas, presentaciones y actos varios, han sumado 40 actos y finalizarán el año con medio centenar.

Además, hace poco menos de un mes, la IGP Cecina de León modificaba su reglamento para poner en valor la calidad de este producto, facilitar el acceso a este marchamo a todos aquellos operadores que cumplan los requisitos y aumentar las garantías de los consumidores mediante el refuerzo de los sistemas de control oficial.

La Cecina de León es un producto cárnico curado, elaborado a partir de cuartos traseros de ganado vacuno mayor, sometidos a un proceso de elaboración que incluye las operaciones de salado, lavado, asentamiento y secado. Lo que hace especial (en cuanto a coloración, veteado, jugosidad y poca fibrosidad) y dota a esta cecina de un sabor inigualable es el proceso de elaboración, que siempre supera los siete meses y se lleva a cabo en las condiciones de altitud y clima propios de la provincia de León.