En los siete días de la campaña se han controlado cerca de 35.000 vehículos y se han detectado a 282 personas circulando sin llevar puesto ningún sistema de retención en Castilla y León.

El 76% de las personas  que han sido detectadas sin hacer uso del dispositivo de seguridad circulaban por vías secundarias.

El uso del cinturón de seguridad en los vehículos reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente.

Durante los siete días que ha durado la campaña de intensificación de la vigilancia del uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil (SRI) realizada por la Dirección General de Tráfico entre el 1 y 7 de octubre,  los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC) en Castilla y León detectaron a 10 menores de edad viajando en un vehículo sin usar ningún tipo de sistema de retención. En concreto, 5 de ellos ocupaban  asientos delanteros y otros 5 iban en los asientos traseros.

Este dato preocupa sensiblemente a la Dirección General de Tráfico, ya que uno de los objetivos previstos en la Estrategia de Seguridad Vial aprobada por el Gobierno para 2011-2020 es lograr que ningún niño pierda la vida por no ir sentado en una silla adecuada.

Durante la campaña,  los agentes destinados en Castilla y León han controlado 34.998 vehículos en los que han detectado 282 infracciones de conductores o pasajeros que no hacían uso del reglamentario sistema de retención.

Además de los 10  menores que viajaban sin ningún tipo de retención, se suman otros 272 adultos que se desplazaban sin hacer uso del cinturón de seguridad por las carreteras del Castilla y León.

La gran mayoría de las personas que no hacían uso de dicho dispositivo circulaba por carreteras convencionales en Castilla y León. En concreto de las 282 denuncias interpuestas, el 76% de ellas (215) fueron en este tipo de vías.

Según el director general de Tráfico, Pere Navarro, “este tipo de campañas hay que seguir realizándolas, porque la realidad de los accidentes nos muestra que un porcentaje alto de los fallecidos en accidente de tráfico no hacía uso del cinturón de seguridad. Este fin de semana, de los seis fallecidos que viajaban en turismo, cuatro de ellos no hacían uso del mismo.”

A estos datos hay que añadir los vehículos controlados en los municipios, cuyas policías locales se han sumado a la campaña de vigilancia de la DGT.

Esta campaña forma parte del calendario de campañas realizadas por TISPOL, de modo que la vigilancia de este dispositivo de seguridad se ha intensificado en toda Europa.

Con esta acción coordinada se pone de manifiesto la vital importancia de los sistemas de retención en el vehículo, ya viajen los pasajeros en asientos delanteros o traseros, sean mayores o niños, vayan por autopista, autovía, carretera convencional o por ciudad.

UN SEGURO DE VIDA

El uso del cinturón de seguridad en los vehículos reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente. Por lo tanto, resulta evidente que el cinturón de seguridad es un elemento básico de la seguridad vial, un seguro de vida. Su uso es obligatorio para todos los ocupantes del vehículo y en todo tipo de vías.

Los menores de edad de estatura igual o inferior a 135 cm que se desplacen en vehículo, además de viajar con el sistema de retención infantil adecuado a tamaño, como la norma exige, deberán ir sentados obligatoriamente en los asientos traseros de los vehículos,  excepto:

  1. Cuando el vehículo no disponga de asientos traseros
  2. Cuando todos los asientos traseros estén ya ocupados por otros menores de las mismas características
  3. Cuando no sea posible instalar en dichos asientos traseros todos los sistemas de retención infantil.

Solamente en estos casos los menores podrán ocupar el asiento delantero del vehículo, pero siempre utilizando el sistema de retención homologado tamaño.