Zidane introdujo 9 cambios con respecto al Clásico y le salió bien. La segunda unidad fue un huracán en Riazor y solventó el partido en apenas 14 minutos. Lucas Vázquez, Isco, James, Asensio o Morata dieron muestras de que están preparados para cualquier partido.

Ni acomodarse nos dejaron para ver el juego. La gente apenas había abierto la bolsa de snacks y zas, el primero. Isco sacó la varita mágica y se la puso a Morata, 0-1. Ni un minuto se había disputado en Riazor. Asensio y el malagueño se las ideaban para maniobrar. El mismo autor del primero, tuvo el segundo pero tiró al muñeco. En medio del vendaval blanco, James, de exterior, puso el 0-2 tras bola de Lucas Vázquez. Los de Zidane pudieron reventar del todo el marcador, pero perdonaron, bajaron unos decibelios el ritmo, y Andone acortó distancias para los gallegos. Esta película la hemos visto muchas veces. Disparó Carles Gil y Casilla repelió la igualada. Y cuando el partido había cambiado, Isco siembra y recoge el coruñés, Lucas Vázquez para el tercero y poner tierra de por medio al entretiempo.

El ritmo bajó y el Madrid se encontraba cómodo manejando tranquilo. El colombiano volvió a aparecer para reivindicarse tras otra gran jugada de Isco, previa combinación con Morata. Pero, cuando el mago está juguetón, pasa lo que pasa. Isco puso el 1-5 ante el deleite de todos. Otro enorme partido de un genio. Joselu recortó para decorar el resultado, aunque Casemiro puso otro más en un partido roto. 

Lucas Vázquez, participativo en todas las acciones ofensivas del Real Madrid, junto con Isco, James y Asensio, menearon al Deportivo con solidaridad, trabajo y magia. Gran victoria del equipo de Zidane para seguir dependiendo de sí mismos.

Juan Lorenzana Prieto @juanlp91

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