La subida de impuestos, las nefastas medidas adoptadas por Gancedo y el retroceso en los servicios aparcan a San Andrés de la senda del crecimiento de población

“Gancedo hará que San Andrés del Rabanedo pase a la historia negra de la provincia no sólo por subir los impuestos sino por perder población”. Así ha valorado el PP de San Andrés los datos sobre la pérdida de población en el tercer municipio de la provincia que ha perdido 275 habitantes respecto al padrón del año anterior. Para los populares “las decisiones adoptadas en estos casi dos años en los que ha gobernado el PSOE-PAL no pueden ser más desafortunadas y contrarias para ciudadanos, empresas y trabajadores” al tiempo que consideran que “todo tiene un límite y así no se puede seguir”.

A su juicio, María Eugenia Gancedo ha cambiado “el rigor económico, el interés general, el respeto institucional y el sacrificio que marcó la etapa en la que gobernó el Partido Popular por la improvisación y las decisiones nefastas para perjuicio de todos que ha caracterizado al gobierno del PSOE y su socio del PAL desde junio del 2015”.

Con esta situación, el PP augura que la caída de la población será mayor en los próximos años. De hecho, aseguran los ediles del PP, que la subida de los impuestos, medida estrella del gobierno de Gancedo, será notada por los ciudadanos y empresas de manera ostensible en los próximos meses, al igual que ya ha ocurrido con el “escandaloso” incremento del Impuesto de Actividades Económicas que ha puesto a muchas empresas “contra las cuerdas”.

Así, vaticina el PP, que “este descenso de población que refleja el INE es  sólo el principio de una bajada que se prevé considerable para el futuro debido a las nefastas medidas económicas y sociales adoptadas por la alcaldesa socialista, María Eugenia Gancedo y su socio del PAL”. Decisiones que hacen que se rehuya el asentamiento de población dado que San Andrés se ha convertido, gracias a la alcaldesa socialista, en uno de los municipios dónde la tasa impositiva es mayor, o lo que es lo mismo, uno de los municipios de España dónde vivir es más caro. Y todo ello, añaden, mientras se nota una merma considerable en los servicios que se ofrecen a los ciudadanos.