Ante la revisión al alza del coste del servicio por la subida del carburante, León en Común pide que se tenga en cuenta el menor consumo de los autobuses modernos.

La comisión de Hacienda del Ayuntamiento de León decidió este martes una subida del coste por kilómetro recorrido de los autobuses urbanos de León como consecuencia de la subida del precio de los carburantes. Este acuerdo incrementa la subvención que el propio Ayuntamiento paga a la empresa concesionaria, ALESA, y se ha realizado a propuesta de la propia empresa aplicando los criterios reflejados en el pliego de condiciones firmado entre los entes público y privado.

A raíz de esto, León en Común preguntó en dicha comisión por la posibilidad de revisar la cláusula que regula este punto. A propuesta de su concejala, Victoria Rodríguez, LeC pretende que se tenga en cuenta el menor consumo de combustible de los vehículos actuales, inferior al que tenían los autobuses de 2006, año en el que se formalizó el contrato.

De esta manera, León en Común espera que el peso del precio del carburante «se ajuste más al consumo real de combustible, y por tanto la retribución que pagan las arcas públicas se ajuste mejor al coste real del servicio».

A pesar de su propuesta, los comunes aclaran que su propuesta «sólo sería un parche a un pliego de condiciones tremendamente perjudicial para las arcas municipales, y muy beneficioso para la empresa». Apuntan que «la medida realmente efectiva sería resolver un contrato que paga a la empresa por kilómetro recorrido, en lugar de por número de viajeros», y que ha tenido como consecuencia «un servicio de autobuses que ha perdido muchísimas personas usuarias y cuyos líneas sólo dan vueltas y más vueltas para incrementar el beneficio de ALESA».