Excelentísimo Señor Don Antonio Silván:
Queremos empezar aclarando que en León en Común estamos totalmente a favor de la reutilización de locales en desuso, siempre y cuando supongan una mejora cualitativa y un aprovechamiento más racional de los recursos públicos. Esta chapuza, a todas luces, no lo es. No se engañe, Sr. Silván, ni pretenda engañar a la ciudadanía con ello.
No son solo los argumentos como la lejanía y el contexto social vinculado a la prostitución los que hacen que nos manifestemos abiertamente en contra del traslado del Conservatorio al estadio de futbol. No le va a resultar tan fácil deslegitimar de esta forma torticera las razones de un buen montón de personas representadas por las más de 7000 firmas (y subiendo) en contra del traslado, y todo el ruido social que este desatino malintencionado está levantando.
Nuestros argumentos los conoce usted tan bien como nosotras y nosotros. Las instalaciones de la nueva ubicación no reúnen ni en lo más mínimo condiciones de iluminación y habitabilidad para la actividad docente, por más que se gasten 4 millones, o los que finalmente sean. Gástenselos mejor en acondicionar el actual, pues incumple la Ley de Accesibilidad desde el pleistoceno medio, al no contar ni con un triste montacargas entre su equipamiento. Tampoco cumple con la seguridad más elemental, pues la instalación eléctrica data de tiempos del Grial de Doña Urraca. Los bajos del campo de fútbol no están adecuadamente dimensionados ahora mismo para acoger la actividad, y por mucho que quieran invertir, no daría la talla si quisiera dimensionarse dejándolo al nivel de otros Conservatorios como el de Palencia o Salamanca.
Y seguimos argumentando: en el nuevo emplazamiento no se cumple la función de lugar de transición y permeabilidad cultural con el entorno que debe cumplir cualquier centro dedicado a la cultura. Es decir, un barrio convenientemente poblado para el que el Conservatorio sirviera de dinamizador cultural. Y es que, Sr Silván, creemos que no está informado de que el estadio de fútbol está rodeado de accidentes geográficos que en nada se nutren de la cultura, como el río al frente, una rotonda de salida a autovía por un lado, el parking de un polideportivo por otro, y la nada a la espalda.
Estos son nuestros argumentos, Sr. Silván, y con nuestra mejor intención se los ofrecemos. A cambio, tenemos mucho interés en saber en qué quiere emplear el actual edificio del conservatorio. A nosotros no se nos escapa (parece que a usted sí) que la ubicación del actual conservatorio corresponde a un triángulo delimitado por el propio Ayuntamiento como zona de dedicación cultural, compuesto por la biblioteca, el Instituto Leonés de Cultura, y el Conservatorio. Tampoco se nos escapa que han decidido perdonar a la Junta la inversión, ya presupuestada, de un nuevo conservatorio de música para León. Estamos seguros de que a usted le valdrá seguro alguna medalla en su partido pero, le informamos, las leonesas y leoneses no lo vamos a permitir.
No, Sr. Alcalde. Convénzase. Se han acabado los tiempos en que los votos conceden cheques en blanco.
León en Común.
